Tu plan semanal integrado
Incluye dos sesiones fuertes, dos moderadas y dos de recuperación activa. Añade diez minutos de vinyasa previo a los días exigentes y yin al final de los moderados. Mantén una meditación breve diaria para consolidar hábitos sin fricción.
Tu plan semanal integrado
Tres pausas de un minuto para respirar con intención, estirar caderas al levantarte y hacer un escaneo corporal antes de dormir. Son anclas que sostienen tu enfoque y reducen el desgaste invisible que suele sabotear la consistencia.